Vecino de Tixtla fue asesinado y después tirado a una barranca
Tixtla.— Un vecino de la ciudad de Tixtla fue encontrado muerto en el fondo de la barranca conocida como Zoconán, ubicada sobre la carretera que conduce a la comunidad de El Troncón, a unos tres kilómetros de la cabecera municipal.
El cadáver estaba boca abajo y con la cara enterrada a la entrada de un tubo de desagüe, por lo que las autoridades municipales suponen que fue tirado desde la carretera, ya que se encontraron algunas huellas de sangre.
El ahora occiso fue trasladado a esta capital y depositado en la morgue en calidad de desconocido y más tarde identificado y reclamado por sus familiares.
El ahora occiso respondió al nombre de Pedro Cortez Ramírez, de 29 años de edad, y tenía su domicilio en la calle Murillo, número 28 del Barrio de San Isidro, en la ciudad de Tixtla.
Con relación a los hechos, la Comandancia de la Policía Municipal de Tixtla, informó que alrededor de las nueve de la mañana de ayer recibieron un reporte vía telefónica acerca de que en la barranca Zoconán, antes de llegar a la comunidad de El Troncón, se encontraba una persona privada de la vida.
Ante ese reporte, al lugar indicado se dirigieron elementos de la Policía y Protección Civil Municipal y luego de una intensa búsqueda encontraron el cadáver en la barranca ya mencionada, además de que sobre la carretera se apreciaron manchas de sangre, por lo que se dijo que el ahora occiso no murió a consecuencia de la caída, sino que fue tirado ya muerto a ese lugar.
Fueron los mismos policías quienes se encargaron de dar aviso a las autoridades ministeriales, trasladándose al lugar el agente del Ministerio Público de Tixtla, acompañado de un perito especializado en criminalística y un médico forense.
El primero de los mencionados fue el encargado de hacer las diligencias correspondientes, ordenando que el cuerpo fuera trasladado a esta capital y depositado en las instalaciones del Servicio Médico Forense, donde más tarde fue reclamado por sus familiares y conducido a su lugar de origen. (NOTYMAS)
El cadáver estaba boca abajo y con la cara enterrada a la entrada de un tubo de desagüe, por lo que las autoridades municipales suponen que fue tirado desde la carretera, ya que se encontraron algunas huellas de sangre.
El ahora occiso fue trasladado a esta capital y depositado en la morgue en calidad de desconocido y más tarde identificado y reclamado por sus familiares.
El ahora occiso respondió al nombre de Pedro Cortez Ramírez, de 29 años de edad, y tenía su domicilio en la calle Murillo, número 28 del Barrio de San Isidro, en la ciudad de Tixtla.
Con relación a los hechos, la Comandancia de la Policía Municipal de Tixtla, informó que alrededor de las nueve de la mañana de ayer recibieron un reporte vía telefónica acerca de que en la barranca Zoconán, antes de llegar a la comunidad de El Troncón, se encontraba una persona privada de la vida.
Ante ese reporte, al lugar indicado se dirigieron elementos de la Policía y Protección Civil Municipal y luego de una intensa búsqueda encontraron el cadáver en la barranca ya mencionada, además de que sobre la carretera se apreciaron manchas de sangre, por lo que se dijo que el ahora occiso no murió a consecuencia de la caída, sino que fue tirado ya muerto a ese lugar.
Fueron los mismos policías quienes se encargaron de dar aviso a las autoridades ministeriales, trasladándose al lugar el agente del Ministerio Público de Tixtla, acompañado de un perito especializado en criminalística y un médico forense.
El primero de los mencionados fue el encargado de hacer las diligencias correspondientes, ordenando que el cuerpo fuera trasladado a esta capital y depositado en las instalaciones del Servicio Médico Forense, donde más tarde fue reclamado por sus familiares y conducido a su lugar de origen. (NOTYMAS)
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