Hay un monitoreo permanente a la presa porque llega más agua de la que desfoga

Aun cuando la situación no es de alarma en la presa del Cerrito Rico, el Ayuntamiento de Chilpancingo monitorea de manera permanente el agua que llega de Amojileca y la sierra de Omiltemi, ya que es un hecho que arriba mucha más de la que se desfoga a través de la compuerta.

Entrevistado la tarde de ayer durante un recorrido que realizó por la presa del Cerrito Rico y algunos puntos de la ciudad, principalmente por los lugares donde el Ayuntamiento ejecuta obras de reconstrucción de la red de drenaje y de agua potable, el presidente municipal de Chilpancingo, Héctor Astudillo Flores, informó también que afortunadamente hasta el momento no se han presentado problemas graves de inundaciones en la capital y sólo algunos taponamientos en la red de drenaje.
Acompañado por el director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach), Nabor Ojeda de la Peña; el secretario de Seguridad Pública, Bonifacio Montúfar Mendoza, y el director de Protección Civil, Marco César Mayares Salvador, entre otros funcionarios de la administración municipal, Astudillo Flores visitó la parte superior de la presa del Cerrito Rico —a la altura de la subestación de la Comisión Federal de Electricidad— en donde constató que a esa hora —las seis de la tarde— llegaban a la represa aproximadamente cinco metros cúbicos por segundo, aunque el domingo el nivel del agua que llegó era de entre 12 y 15 metros cúbicos de agua por segundo.
El problema es que a través de la compuerta de la presa únicamente se desfogan cuando mucho tres metros cúbicos de agua por segundo, es decir, llega mucha más de la que sale, lo cual hasta el momento tiene a la presa a un 40 por ciento de su capacidad, aproximadamente, y todavía faltan los meses de agosto y septiembre, que es cuando más llueve.
Astudillo Flores aclaró que este no es un asunto que deba provocar alarma, pero sí señaló que por la misma situación el Ayuntamiento a su cargo, a través de la Dirección de Protección Civil se encuentra en alerta y monitorea cuando menos tres veces al día el arribo de agua a la presa del Cerrito Rico con el fin de evitar contingencias, sobre todo porque las lluvias registradas durante los últimos días en la capital han sido “considerables”.
Por esta situación, el alcalde capitalino hizo un llamado a las familias que habitan en las márgenes de las barrancas y del río Huacapa en la parte norte, a que estén alerta, ya que a pesar de que hasta el momento no hay daños importantes por las lluvias “sí es muy conveniente que todos estemos en una actitud preventiva”.
Incluso, debido a que el nivel de la presa va en ascenso, ayer mismo instruyó al personal de Protección Civil a que de manera inmediata notifique a las familias que tienen asentadas sus viviendas en sus márgenes a que tomen las medidas precautorias necesarias, sobre todo porque ya le ganaron terreno a la misma represa. (Baltazar Jiménez Rosales)