En horas el MPFC decide la situación jurídica de policías asesinos de menor

El director de Seguridad Pública del municipio de Juchitán y siete policías más, rindieron su declaración ante el Agente del Ministerio Público del Fuero Común (MPFC) de San Luis Acatlán, en una averiguación previa que se abrió por el asesinato de un niño y herir a otro cuando disuadían una protesta de ciudadanos al
parecer alcoholizados en la comunidad de Agua Zarca.
De acuerdo al MPFC, en las próximas horas se va a determinar la situación jurídica de los ocho presuntos implicados, quienes el pasado domingo en la tarde en la comunidad de Agua Zarca, del municipio de Juchitán, un grupo de policías preventivos tuvieron un altercado con un grupo de ciudadanos que participaban en el tradicional recorrido de la fiesta religiosa del santo patrono Señor Santiago.
En ese primer desencuentro de agresiones verbales, los policías lograron detener al joven Tomás Tapia Ramírez a quien se lo llevaban detenido por las calles y eso provocó la molestia de los vecinos de la localidad, quienes increparon a los policías para lograr la liberación del joven.
Los uniformados trataron de disuadir a la turba lanzándole gases lacrimógenos y fue entonces que se registró forcejeo con los policías quienes iban armados con rifles R-15.
“Los jóvenes derribaron al suelo a los policías a quienes trataron de quitarles sus armas y que durante el forcejeo hubo disparos y desafortunadamente uno tiro le pegó de rebote al niño Gabriel Hernández García quien murió de manera instantánea”, dijo el alcalde entrevistado vía telefónica.
Indicó que en esta trifulca resultó herido de un balazo en la pierna izquierda a Roberto Zúñiga Santos quien es atendido en el Hospital General de Ometepec.
Aseguró que luego de estos hechos, los siete policías fueron detenidos y ayer martes rindieron su declaración ante el Agente del Ministerio Público del Fuero Común de San Luis Acatlán.
También rindió su declaración el director de la Policía Preventiva Municipal, Gaudencio Ramírez Justo quien este domingo no fue detenido, “pero se le pidió que se presentara a declarar y si tiene alguna responsabilidad en esto que se le aplique la ley”.
El alcalde que fue entrevistado vía telefónica, dijo que lo que ocurrió en Juchitán, “fue algo lamentable”.
En tanto, la versión de los lugareños es que el director de la Policía Municipal, Gaudencio Ramírez Justo y los siete uniformados iban en estado de ebriedad y que fueron los que provocaron la gresca y que ocasionó la muerte del niño.
En el sepelio del niño de 11 años de edad, Gabriel Hernández García, los familiares de éste exigieron a la Procuraduría de Justicia del Estado sean castigados con todo el peso de la ley a los policías municipales. (www.agenciairza.com)

Comentarios