Vecino de Coscamila fue asesinado en las inmediaciones de Quechultenango
Quechultenango, Gro.- Un vecino de Coscamila, municipio de Quechultenango, fue ejecutado a balazos en la salida de esta cabecera municipal cuando se dirigía a su casa a bordo de su bicicleta.
El ahora occiso es quien en vida respondía al nombre de Filiberto Navarrete Morales, de 40 años de edad, y tenía su domicilio en la población de Coscamila. Los hechos se registraron cerca de las 23:00 horas del miércoles.
Se conoció que Filiberto Navarrete se dirigía a su domicilio a bordo de su bicicleta cuando al transitar sobre la carretera Chilpancingo-Colotlipa, en el kilómetro 27+800, a la altura de unos topes, personas desconocidas ya lo esperaban a bordo de un carro.
Los supuestos delincuentes al ver que iba tranquilamente en su bicicleta le aventaron el carro, por lo que el ahora occiso salió disparado por los aires, pero al caer al suelo, uno de sus batacantes asesinos sacó una pistola al parecer calibre 9 milímetros y le disparó quemarropa dándole dos balazos, uno en el pecho y otro en la cara. Filiberto murió instantáneamente.
Vecinos de la cabecera municipal de Quechultenango al escuchar las detonaciones del arma de fuego despertaron y salieron de sus casas, y tras percatarse de los hechos dieron aviso al Ministerio Público.
Cuando el auxiliar del MP iniciaba las diligencias de ley, llegó al lugar del crimen la esposa del ahora occiso, Paulina Vázquez Balbuena quien se opuso a que el cuerpo fuera traído a Chilpancingo, por lo que únicamente le hicieron un reconocimiento externo y en ese mismo lugar fue entregado. (ANG).
El ahora occiso es quien en vida respondía al nombre de Filiberto Navarrete Morales, de 40 años de edad, y tenía su domicilio en la población de Coscamila. Los hechos se registraron cerca de las 23:00 horas del miércoles.
Se conoció que Filiberto Navarrete se dirigía a su domicilio a bordo de su bicicleta cuando al transitar sobre la carretera Chilpancingo-Colotlipa, en el kilómetro 27+800, a la altura de unos topes, personas desconocidas ya lo esperaban a bordo de un carro.
Los supuestos delincuentes al ver que iba tranquilamente en su bicicleta le aventaron el carro, por lo que el ahora occiso salió disparado por los aires, pero al caer al suelo, uno de sus batacantes asesinos sacó una pistola al parecer calibre 9 milímetros y le disparó quemarropa dándole dos balazos, uno en el pecho y otro en la cara. Filiberto murió instantáneamente.
Vecinos de la cabecera municipal de Quechultenango al escuchar las detonaciones del arma de fuego despertaron y salieron de sus casas, y tras percatarse de los hechos dieron aviso al Ministerio Público.
Cuando el auxiliar del MP iniciaba las diligencias de ley, llegó al lugar del crimen la esposa del ahora occiso, Paulina Vázquez Balbuena quien se opuso a que el cuerpo fuera traído a Chilpancingo, por lo que únicamente le hicieron un reconocimiento externo y en ese mismo lugar fue entregado. (ANG).
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