Será difícil para el gobierno de Aguirre combatir la pobreza: Jiménez Rumbo

Tras reconocer que Guerrero es el segundo lugar en pobreza tanto alimentaria como patrimonial a nivel nacional, sólo atrás de Chiapas, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) del gobierno estatal, David Jiménez Rumbo también aceptó que será difícil de combatir este flagelo y que los programas que
maneja la dependencia a su cargo únicamente lo atenuarán.
El funcionario estatal también calificó al gobierno de “transición” de Zeferino Torreblanca Galindo como fallido y al que hoy encabeza Angel Aguirre Rivero como el de la verdadera alternancia.
David Jiménez Rumbo acudió ayer como invitado especial a la sesión del Grupo Cuicalli, que encabeza el empresario capitalino Adolfo Chávez Romero, quien al darle la bienvenida señaló que para abatir los altos índices de pobreza y marginación del estado es necesario un crecimiento firme y sostenido que genere empleos para que la gente obtenga mejores salarios y se incorpore a la actividad económica e insistió en que sólo de esta manera se dejará de lado el paternalismo político cuyo objetivo es únicamente lograr votos en las urnas.
Chávez Romero criticó la duplicidad de programas que hay entre las mismas dependencias del gobierno estatal, lo cual hace que los resultados no sean satisfactorios en muchos casos.
En su oportunidad, Jiménez Rumbo, reconoció que la entidad es el segundo lugar a nivel nacional en pobreza y que, aún más, en Guerrero están los dos municipios más pobres de toda Latinoamérica —Metlatónoc y Cochoapa El Grande— que hasta “los presumimos”.
Sin embargo, aceptó que para el gobierno que encabeza Aguirre Rivero, será muy difícil combatir este flagelo y que los programas de asistencia social que maneja la dependencia a su cargo y las demás dependencias gubernamentales sólo atenuarán el problema.
Informó asimismo que el gobernador determinó cancelar dos convenios que había signado su antecesor en el cargo: primeramente decidió no ejecutar obras de manera “concurrente” con el gobierno federal por las “reglas de atraco” que maneja y canceló el que tenía con la Congregación Mariana Trinitaria, pues resulta que nada más jineteaba los recursos y en muchos casos no aportó lo convenido, como en el caso del ayuntamiento de Tlapa a quien la citada organización le debe poco más de dos millones de pesos.
Jiménez Rumbo señaló además que contrario a lo que ocurrió en dependencias como Salud y Educación, en la Sedesol no encontró anomalías financieras. Es más, mencionó que encontró “traspapelada” una bolsa de 73 millones de pesos que no estaban etiquetados, de los cuales tomó para echar a andar diversos programas.
Más adelante, tras calificar como fallido el gobierno de transición de Zeferino Torreblanca Galindo, en el cual el PRD fue excluido, Jiménez Rumbo dijo que el de Angel Aguirre sí es el de la alternancia, tan es así que por ese motivo fue complicada su integración.
Finalmente, a pesar de que dijo estar de acuerdo con la aplicación del examen antidoping a los funcionarios del gobierno estatal, el secretario de Desarrollo Social resaltó que sería más importante someter a la prueba del polígrafo a los servidores públicos con una sola pregunta: “¿vienes a robar sí o no?” (Baltazar Jiménez Rosales)