Le robaron su automóvil a un médico y lo usaron para deshacerse de un cadáver

Acapulco, Gro.- Un grupo de hombres armados robaron un vehículo Toyota tipo Yaris color verde, con placas de circulación HEN-6172 particulares de Guerrero, propiedad del doctor Federico Eduardo Pintos Ponce, de 50 años de edad.

El propio agraviado al denunciar el robo, dijo que los sujetos lo interceptaron aproximadamente a las diez de la noche del martes sobre la calzada Pie de la Cuesta.
Explicó que iba acompañado de su esposa y que a ambos los bajaron del Toyota encañonándolos con pistolas, a la altura de una guardería infantil, y que les ordenaron que dejaran todas sus pertenencias en el auto, en el cual huyeron seguidos de los demás que iban en otro auto compacto.
Señaló que en su auto los sujetos se llevaron cinco mil pesos en efectivo en su cartera, documentos personales y tarjetas bancarias, además del bolso y pertenencias de su señora esposa.
Señaló que con su esposa tomó un taxi y regresaron a su domicilio, y este día acudieron a presentar la denuncia de su automóvil y sus pertenencias.
APARECIÓ, CON UN CADÁVER:
Siendo aproximadamente las 03:27 horas, sobre la carretera México-Acapulco, a la altura de la colonia Benito Juárez, en Acapulco, fue encontrado el automóvil Toyota, tipo Yaris, color verde, placas HEN-6172 robado la noche del martes al médico Federico Eduardo Pintos Ponce, solo que dentro del coche había un cadáver.
Policías informaron que en el mencionado lugar se encontraba estacionado el referido vehículo, y en su interior en el asiento trasero el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino de aproximadamente 28 años de edad, 1.65 metros de estatura, complexión delgada, tez morena clara, cabello ondulado de color negro.
A simple vista se le apreciaron cuatro impactos de proyectil de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo, al parecer calibre 9 milímetros, en virtud de que se localizaron 7 casquillos percutidos del citado calibre; hasta el momento se desconoce el móvil del homicidio, así como la identidad del o los homicidas. Quedando en calidad de desconocido. (Con información oficial y de IRZA)

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