LAS COSAS COMO SON…

POR: Tomás Benítez Cano

LA CAPITAL, YA EN DISPUTA.

Que cuánto tiempo vaya a durar, no lo sabemos porque de los políticos todo se puede esperar. Lo cierto es que ayer se confirmó el distanciamiento entre el gobernador Angel Aguirre Rivero y el alcalde Héctor Astudillo Flores, quien no asistió al acto de arranque del “programa de prevención de inundaciones y
encauzamiento del Río Huacapa”. Y no acudió porque no fue invitado, en respuesta a su ausencia en la reunión del mandatario estatal con presidentes municipales de la zona centro la semana pasada, donde ahí si fue convocado.
En apariencia, se podría adelantar que solo se trata de un simple enfriamiento en las relaciones. Sin embargo, hay otros elementos que nos indican que las cosas van más allá de un berrinchito y tal pareciera que cada quien ya tomó la decisión de trabajar por separado en Chilpancingo.
Por ejemplo, el munícipe ya tenía programado un evento que se llevaría a cabo ayer jueves a las cinco de la tarde en la entrada a la colonia La Cinca, al sur de la ciudad. Por supuesto y como debe ser, se corrió la invitación a los colonos --ya que se inaugurarían unos muros de concreto que se hicieron para evitar el desbordamiento del Huacapa-- a quienes se les confirmó, por personal del Ayuntamiento, que Astudillo asistiría solo (sin el gobernador).
Sin embargo, ayer mismo, personal de giras del Ejecutivo Estatal llegó por la mañana al mismo lugar donde se realizaría el acto del Ayuntamiento e instaló un templete y un equipo de sonido, “porque va a venir el gobernador”, informaron a los vecinos de La Cinca que solicitaron información y a quienes no invitaron. Total que con acciones para atacar el mismo problema, las inundaciones, se le adelantaron al alcalde capitalino, quien no tuvo más que cancelar su actividad inaugural.
Si este ejemplo lo analizamos en prospectiva, sin duda alguna que Chilpancingo saldrá ganando porque habrá más obras y servicios, puesto que cada quien luchará por ganarse a la ciudadanía con miras al ya no tan lejano proceso electoral, donde tanto el uno como el otro querrán dejar a sus respectivos delfines.
La ruptura Aguirre-Astudillo, por supuesto que no se puede comparar con la de Zeferino-Astudillo, porque en esta última el que más necesitaba del otro era Torreblanca Galindo, quien nunca fue santo de la devoción del pueblo de Chilpancingo y que para poder ser medio aceptado en la capital tuvo que andar de manita sudada con el alcalde, el cual aprovechó la oportunidad para sacarle algunas inversiones. En el primer caso las cosas son muy diferentes, puesto que el gobernador actual tiene un alto grado de aceptación entre los chilpancingueños, por lo que no necesita –en ese sentido-- la ayuda de Héctor Antonio. En resumen, dadas las condiciones antes descritas, todo indica que cada quien va a trabajar por separado en la capital.
Y la verdad que no hay ningún riesgo de que los recursos se dupliquen, porque cada quién invertirá en lo que crea más rentable, políticamente hablando. Tampoco existirá el riesgo de que se vayan las grandes obras, puesto que el esquema de inversión tripartita cada día es menos frecuente, además de que por el momento no está agendada ninguna mega obra que requiera la concurrencia de los tres niveles de gobierno. Podría ser lo del agua, pero eso será después del venidero proceso electoral.
Aterrizando el asunto, una lectura inequívoca es que el gobernador Angel Aguirre trabajará sin Astudillo en Chilpancingo porque va por el en el próximo proceso electoral. Es más, en una lectura menos clara, podríamos decir que ya hasta tiene su delfín.
Esto último es un tanto inconsistente porque no tenemos al alcance los suficientes elementos que nos permitan concluir sin riego de equivocarnos, pero en abono de nuestro análisis futurista le informamos que –coincidencia o no—el diputado Jorge Salgado Parra ha decidido redoblar el trabajo legislativo y de gestoría, ha contratado los servicios de un profesional para que le maneje su imagen y está sembrando los enlaces para poder penetrar en todos los sectores sociales del municipio. Su programa de trabajo contempla aprovechar casi todos los fines de semana y la difusión profusa de sus actividades. Por si fuera también coincidencia, ayer el doctor –como le llaman sus matraqueros-- fue uno de los invitados del gobernador Aguirre al evento de La Cinca. Todo al mismo tiempo.