Habitantes de Zumpango comienzan a pagar por la falta de un desarrollo urbano organizado

Desde hace tres días una familia de la colonia San José en la cabecera municipal de Zumpango, se encuentra habitando en un templo evangélico donde les permiten pasar la noche luego de que su vivienda fue destruida por las lluvias registradas la madrugada del pasado viernes, mientras que las autoridades no les han brindado
ningún tipo de ayuda.
Lucano Delgado Román, su esposa, madre y tres hijas, son los integrantes de la familia que el pasado viernes vio ceder los ladrillos de las paredes de su casa ante la presión del agua que se encauzó hacia ese lugar luego de que en la parte alta se realizó un relleno para emparejar una calle, “la primer pared que cayó fue la de atrás del cuarto de las niñas, afortunadamente todos pudieron salir antes de que los ladrillos cayeran justo encima de las camas”.
El hombre indicó que, desde que la barda cedió, su casa se convirtió en un río porque por ella pasó el caudal el agua y tierra que bajan de las partes altos de la colonia.
Dijo que sus vecinos en la parte alta de su casa realizaron un relleno de tierra lo que ocasión que el agua buscara nuevos sitios por donde salir y a mayor pate fue por su domicilio, sin embargo también se fue por la calle paralela en la que ayer domingo se derribó la barda perimetral de una casa que tenía alrededor de 30 metros de largo tres de alto.
La nueva afectación fue en el domicilio del señor José Martín Salgado Muñoz, quien relató que alrededor de las tres de la mañana de este domingo, escuchó un estruendo y cuando salió a su patio, la barda perimetral de encontraba en el suelo, “imagínese si hubiera habido cuartos en este lugar”.
Dijo que acudieron al ayuntamiento para pedir apoyo para reconstruir la barda, la que además de delimitar su propiedad sirve de muro para que no se desgaje el terreno adjunto porque eso podría derivar en la caída de otra casa, sin embargo en la presidencia municipal y en los domicilios particulares del presidente, sindico y regidores, no encontraron a ninguno, “todos andan fuera, o no quisieron atendernos”.
Añadió que en Protección Civil municipal ofrecieron que acudirían a hacer una inspección a las 10 de la mañana, sin embargo a esa hora no llegaron por lo que llamaron nuevamente por teléfono y les indicaron que la visita se reprogramó a la una de la tarde, pero hasta la una y media aún no llegaban.
Vecinos del lugar indicaron que desde hace años que han venido solicitando a los gobiernos en turno que se hagan obras de pavimentación, y muros para contener y encauzar el flujo de agua, ya que en las temporadas de lluvia constantemente se registran inundaciones y encharcamientos que llegan a tener hasta 40 centímetros de profundidad.
También llamaron a la Secretaría de Salud para que realice una campaña de prevención de enfermedades, pues el agua acumulada como bien se sabe, es el sitio propició para que se desarrollen los moscos transmisores del dengue, y muchos otros microbios, que pueden generar infecciones o enfermedades.
Finalmente indicaron que como vecinos han conseguido costales que llenarán de tierra para colocar barricadas y así impedir que se sigan afectando las casas, pero esa será una solución temporal por lo que urgieron a los gobiernos municipal, estatal y federal para que se busquen una solución definitiva que elimine el riesgo en el que actualmente se encuentran las familias, “ya son dos casas que se han caído y no queremos que se tomen cartas en el asunto hasta que haya un muerto”. (Abel Miranda Ayala)