Castigo divino: se cayó y desmayó cuando golpeaba a su mujer e hija

Ruperto González Carbajal

“Al que obra mal se le pudre el tamal”, o algo por el estilo, reza el viejo y conocido refrán y esto le queda al dedillo a Alejandro Flores Nepomuceno, pues la madrugada de ayer que golpeaba a su esposa e hija, allá en su casa de la colonia Obrera, resbaló y al c caer se dio tremendo chin…tetazo en la cabeza que se desmayó
y tuvo que ser llevado a la Cruz Roja, pero como aún seguía agresivo lo trasladaron a barandilla.
La autoridad municipal informo que ayer a las dos con veinte minutos de la madrugada, Yolanda Tapia Gaspar, acompañada de su hija Elisa Abigail Torres Tapia, de respectivos 52 y 27 años de edad, a bordo de un vehículo particular llegaron a la Comandancia de la Policía Municipal llevando a Alejandro Torres Nepomuceno de 52 años de edad, esposo y padre respectivamente, para pedir su encierro en barandilla pues las había golpeado.
Cabe hacer mención que Alejandro presentaba tremendo chichón en la tatema y al respecto, las mismas mujeres explicaron al juez calificador en turno que cuando las golpeaba se resbaló y al caer se pegó en la cabeza.
Detallaron que se encontraban descansando en su casa que se ubica en calle Francisco González Bocanegra número 5 de la colonia Obrera cuando llegó Alejandro en completo estado de ebriedad y comenzó a discutir con Yolanda y al momento que la agredió a golpes, Elisa Abigail intervino en defensa de su mamá pero también recibió lo suyo.
Debido a que Alejandro estaba ebrio, de manera accidental resbaló y cayó al suelo golpeándose feamente su cabeza, por lo que quedó desmayado.
Al ver lo anterior, entre las dos lo subieron a su automóvil y lo trasladaron a la Cruz Roja donde lo atendieron y después dieron de alta, pero como aun estaba agresivo y medio atontado por el “guamazo” que se dio, aprovecharon para llevarlo a la delegación donde pidieron lo encerraran tras las rejas.