25 mil familias en zonas de alto riesgo en Guerrero: Roel Ayala

De acuerdo con el último censo de población, en Guerrero existen poco más de 25 mil familias que habitan en zonas de alto riesgo, mismo número que representa un gran peligro durante la temporada de lluvias que se avecina, informó la subsecretaría de Protección Civil estatal, quien pidió extremar sus medidas precautorias.

El jefe del departamento hidrometeorológico de la Subsecretaría de Protección Civil, Roel Ayala Mata, señaló que de acuerdo a los pronósticos en la próxima temporada de lluvias, la cual inicia formalmente a partir del quince de mayo, se esperan de manera inestable en comparación con otros años.
Por todo lo anterior, recomendó a la población vulnerable a las precipitaciones pluviales a extremar medidas precautorias, de manera preferente abandonar sus viviendas durante la temporada de lluvias, a fin de evitar cualquier desgracia que lamentar.
Según los datos de la propia dependencia, en Guerrero por lo menos 25 mil familias habitan en zonas de alto riesgo, principalmente en barrancas y laderas de las principales ciudades del estado como Chilpancingo, Acapulco, Iguala, Taxco y Tlapa de Comonfort, a quienes se les ha sugerido de preferencia abandonar los espacios durante las futuras lluvias.
Ayala Mata, señaló que con las primeras lluvias registradas en las regiones Norte y Montaña, se han presentado las primeras afectaciones en la entidad, refiriendo los casos del arrastre de decenas de puestos ubicados sobre el cauce del río Jale, en Tlapa de Comonfort y pequeños derrumbes carreteros.
La afectación obedeció porque los comerciantes ambulantes de ese municipio tradicionalmente utilizan el cauce del río Jale para instalar sus puestos, a cuyas autoridades convocó a vigilar para evitar en lo posible el uso del lugar porque esto pueda desencadenar en consecuencias graves.
Desde otro punto de vista, dijo que las lluvias del fin de semana pasado han beneficiado a los brigadistas combatientes de incendios forestales, pues a raíz de estas precipitaciones pluviales se han calmado los siniestros que hasta el momento han afectado a más de cinco mil hectáreas de bosques.

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