Afirman que amenazó matar a un niño y a ocho “metiches” vecinos

Tremendo escándalo ocurrió en la colonia "Barranca Nacionalista", luego de que una mujer ebria amenazara de muerte con un cuchillo cebollero a un niño de ocho años y a varias personas que le pedían dejar en paz al menor.

Los agraviados pidieron la presencia policiaca y lograron enviar a barandilla a la presunta agresora, Rosa Bucio Infante o Aurora Flores Carrera, de 30 años de edad, quien dijo ser originaria de La Bocana, municipio de Marquelia.
La ahora detenida, desde hace varios meses habita en la calle principal de la colonia "Barranca Nacionalista" que se ubica cerca del fraccionamiento Santa Rosa, su captura ocurrió el lunes cerca de las 20:00 horas.
La agraviada Julia Francisco Guadalupe de 40 años de edad, quien tiene su domicilio en la misma colonia, señaló que esa noche su hijo Luis Fernando de Jesús Francisco lloraba en el patio de su casa, y al escucharlo salió a indagar que le ocurría y fue cuando se percató que su vecina, Rosa Bucio, quien estaba ebria, estaba amenazando al niño con un cuchillo.
Al ver que su hijo se encontraba en peligro, Julia trató de quitarle el arma a Rosa Bucio, con quien forcejeó; cuando se separaron la alcoholizada mujer empezó a pegar de gritos y a arrojar piedras a varios domicilios, por lo que otros colonos salieron de sus casas a enterarse que estaba pasando.
Entre estos se cuentan: Ana Cristina Feliciano Hernández, Minerva Ramos Rivera, Leova Ramos Molina, Casiano Rivera Angel, María de la Paz Morales Cortés, y Julia Hernández Flores, quienes, dicen que también ellos fueron amenazadas de muerte por Rosa, quien en ningún momento soltó el cuchillo.
La policía fue llamada a imponer el orden y Rosa Bucio Infante fue detenida por los uniformados, que le incautaron el cuchillo aquel, enseguida fue llevada a la cárcel municipal a petición de los afectados.
Los presuntos agraviados dijeron al juez de barandilla que, desde hace cuatro meses que llegaron a vivir en ese lugar “la costeña”, como le dicen a Rosa, los agrede constantemente, siempre en estado etílico.
En su defensa, la detenida explicó que ayer mandó a uno de sus hijos a comprar unos cerillos y como se estaba tardando en volver, fue a buscarlo y descubrió que otros niños lo amenazaban con un cuchillo, dice que desarmó al que empuñaba el arma y fue entonces que Julia Hernández la descubrió y se armó el borlote.
A pesar de que se dice inocente, el juez de barandilla no le creyó a Rosa nada de nada, por lo que se dijo que en el transcurso del día de ayer, sería turnada a la Agencia del Ministerio Público. (ANG).

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