Denuncian apatía del rector de la UAG para conmemorar a los Mártires del 60

Sobrevivientes, familiares y amigos de personas que tuvieron participación en el movimiento de 1960, que culminó con la masacre del 30 de diciembre en esta capital, cuestionaron la apatía de la Rectoría de la Universidad Autónoma de Guerrero para realizar actividades académicas y culturales para conmemorar el 50 aniversario de esta gesta ciudadana, que fue el preámbulo para conseguir la autonomía de la máxima casa de estudios.
Arturo Miranda, uno de los integrantes del comité ciudadano organizador de las actividades para recordar a los Mártires del 30 de diciembre de 1960, señaló que lamentablemente el rector de la Universidad, al no ser oriundo del Estado de Guerrero y no haber vivido la historia de nuestra Universidad, desdeñó la propuesta de realizar actos académicos y culturales para que en el 2010, no sólo se recordara la importancia del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución, sino también el primer medio siglo de la autonomía universitaria.
“Lamentablemente, en una actitud hipócrita, sabemos por rumores, que este día el rector se presentará con su sequito de funcionarios ante el monumento a los caídos del 60, en la alameda, Francisco Granados Maldonado, donde el comité ciudadano ha anunciado la realización de varias actividades para recordar a nuestros mártires héroes”, indicó Arturo Miranda, quien actualmente es investigador de la UAG.
Comentó que desde el año pasado un importante grupo de sobrevivientes y familiares se deslindaron de la conmemoración que realiza la rectoría en esta fecha, debido a que “no se le ha dado la importancia que tiene la fecha”, por eso, de manera paralela prepararon actividades entre las que se incluyen la filmación en video de decenas de testimonios que se han recabado y que este día serán presentados en una proyección a las ocho de la noche.
Las actividades de este comité iniciarán a las 9 de la mañana con el acto cívico frente al monumento a los mártires en la alameda, posteriormente a las 5 de la tarde un sacerdote oficiará en ese mismo lugar una misa en honor a los caídos, “el sacerdote, quien se llama Jesús Cuevas, además de la misa expondrá en ese lugar su propio testimonio de vida, pues él nació justamente en medio de la masacre, ya que su madre se encontraba participando en las movilizaciones y al ver a sus compañeros caer abatidos por las balas del ejército, se desmayó y entró en labor de parto”.
Cuestionado del hecho de que finalmente además de los testimonios el comité no organizó actividades académicas y de mayor relevancia a partir del 21 de octubre, que en 1960 fue la fecha de inicio de la huelga, Arturo Miranda indicó que eso fue debido a otra mentira de la rectoría de la Universidad, ya que el día del inicio formal de clases, que se realizó en el edificio docente, el rector, Asencio Villegas Arrizón, habló con ellos para pedirles que se coordinaran para la realización de las actividades y les pidió que esperaran un poco, que él los llamaría para nombrar personal de la rectoría encargado de la organización, “hasta el momento no hemos recibido una llamada, una propuesta de trabajo o siquiera una invitación a su acto”.
Asimismo señaló que el homenaje que supuestamente organiza la rectoría será sólo para Asencio Villegas y sus funcionarios, pues hasta el momento no se ha colocado un volante, un cartel, una invitación a la sociedad, “será un acto gris, del que no seremos partícipes la mayoría de los sobrevivientes y sus familias”.
Finalmente Arturo Miranda, indicó que el movimiento de 1960 representa un parteaguas histórico en el estado de Guerrero, “es un año en el que miles de ciudadanos guerrerenses se lanzaron a las calles a la lucha en contra del gobierno que encabezaba el general Raúl Caballero Aburto, que había atropellado a la sociedad y, en particular, se resalta que esa lucha culminó por una parte con el reclamo de autonomía de la Universidad”. (Abel Miranda Ayala)

Comentarios