De Cochoapa a Malinaltepec: nos perdimos “por los caminos del sur”

Metlatónoc, Gro.- A menos de ocho grados centígrados, bajo un viento helado y desesperados por la tardanza, un centenar de habitantes de este municipio conocido hasta la saciedad por ser uno de los más pobres –sino el que más- no solo de México, sino de toda América Latina, esperaban la llegada del candidato de la Coalición Guerrero Nos Une a la gubernatura del Estado, Angel Heladio Aguirre Rivero, quien según les dijeron, llegaría a las nueve de la mañana. Pero ya eran las 11 y ni sus luces…
Y se aguantaron porque desde las siete de la mañana algunas mujeres del lugar habían comenzado a cocinar cientos de trozos de carne de puerco en un caldillo muy picoso, y era lo único que les esperanzaba, disfrutar cuando menos de un buen almuerzo, aunque ello significara que se les congelaran hasta los huesos.
Los ricos y nuevos ricos del lugar, que por cierto apenas son dos o tres, se paseaban por la calle principal de este paupérrimo lugar intentando construir un templete que a cada rato se les desarmaba y despegaba, mientras pedían al madrugador maestro de ceremonias que informara de su presencia. Eran el ex diputado local Felipe Ortiz Montealegre y el actual, Rutilo Viterbo Aguilar, que solo son conocidos por sus paisanos por su reciente y ostentosa prosperidad, aunque de plano fueron opacados por el presidente municipal de Metlatónoc, Roberto Guevara Maldonado, quien resultó ser una perfecta y exacta evocación de Don Perpetuo Socorro, aquel famosérrimo personaje de “Los Agachados” de Rius.
Con su camisa amarilla nueva y estrenando sombrero, llegó hasta el centro de la “plaza” de Metlatónoc y le ordenó al maestro de ceremonias que anunciara que él venía entrando con su propia banda de música y de inmediato, sus deseos fueron cumplidos.
Pero no contó con que Felipe Ortiz también ama los reflectores e hizo lo propio, así que a lo mejor no había mucha gente, pero eso sí, muchas bandas de música que amenizaban el rato y hacían menos tediosa y fría la espera de los que participarían en el mitin.
Finalmente, poco después de las 11 de la mañana apareció Angel Aguirre Rivero en la que fue su primera presentación como un auténtico perredista, portando la playera amarilla con el ya tradicional símbolo del sol azteca…De inmediato fue abrazado, arropado y apapachado por sus seguidores que estoicos, y eso sí, ya bien comidos, esperaban su llegada.
Vinieron los discursos de siempre; las promesas, los reclamos y los ofrecimientos y luego la comitiva se encaminó a Cochoapa y de ahí a Malinaltepec; aunque la suerte no estaba con todos, pues un pequeño convoy integrado por el ex secretario general de Gobierno Humberto Salgado, por Lázaro Mazón Alonso, la osada representante de DIARIO DE GUERRERO, su hija y un par de reporteros más, se extravió en plena montaña. Entre las brechas, terracerías y caminos, las lujosas camionetas que los conducían equivocaron el camino y durante casi dos horas dieron vueltas en círculos, mientras el chofer sugería que a los indígenas de la Montaña se les ubicara en reservas “en donde además de no pasar hambre ni frío, estarán seguros”.
“Porque hay que tener dignidad”, decía el revolucionario chofer, mientras intentaba salvar los obstáculos que le presentaba el erosionado camino, y trataba de no atropellar a los guajolotes que se le atravesaban…
Nada, no hubo manera de salir y era tanta la desesperación, que Federico Sariñana tuvo que preguntar comedidamente a una joven lugareña…”Excuse me, this is the way to Malinaltepec, say me please”…Obvio que no lo pelaron, pero bueno, él creyó que el inglés sonaba igualitito al mixteco y ahí nos quedamos hasta que una patrulla de la policía municipal acudió en nuestro rescate…