Inactividad física, problema municipal de salud pública

Por: Alma Rocío López Bello

 Afortunadamente varios países ya están adoptando y adaptando políticas públicas encaminadas a motivar, incentivar y en cierta forma obligar a sus ciudadanos a tener más actividad física con el propósito de prevenir y contrarrestar enfermedades serias que día a día se desarrollan en todo el mundo. La Organización Mundial de Salud (OMS) establece que el estilo de vida actual en el mundo es de sedentarismo, al menos el 60 por ciento de la población del mundo no puede completar la cantidad recomendada de actividad física necesaria para inducir beneficios de salud. Esto se debe a la deficiente actividad en el tiempo libre y una conducta sedentaria durante actividades laborales, domésticas y el uso pasivo del transporte. Establece que los niveles de inactividad física son altos en todos los países desarrollados y en desarrollo.
En los países desarrollados más de la mitad de los adultos no son suficientemente activos. La urbanización ha generado factores ambientales que pueden desalentar la participación deportiva, siendo estos: sobre población, aumento de la pobreza, aumento de los niveles de delincuencia, alta densidad de tráfico, baja calidad de aire, falta de parques e instalaciones recreativas. El mayor problema de salud pública en la mayoría de los países son las enfermedades no transmisibles asociadas con la inactividad física . Las tendencias mundiales de alto riesgo por la deficiente inactividad física son los jóvenes, mujeres y adultos mayores, por lo que la OMS hace un llamado a los Estados miembros que consideren específicamente las necesidades de estas poblaciones en el desarrollo y aplicación del programa anual “Muévete por Salud.”
La argumentación que la OMS hace sobre este programa es que cada año por lo menos 1,9 millones de personas mueren como consecuencia de la inactividad física; por lo menos 30 minutos de actividad regular, física de intensidad moderada durante 5 días a la semana reduce el riesgo de varias enfermedades comunes no transmisibles; la inactividad física es un factor independiente de riesgo modificables de las enfermedades no transmisibles comunes; más de 35 millones de personas murieron de enfermedades no transmisibles en 2005, esto representa el 60% del total de muertes en todo el mundo; 80% de las muertes por enfermedades no transmisibles ocurren en países de ingresos bajos y medios; no se toman medidas para abordar las causas; las muertes por enfermedades no transmisibles aumentarán un 17% entre 2005 y 2015.
Urge establecer en México políticas públicas que nos ayuden a modificar nuestro estilo de vida reduciendo el riesgo de salud que tenemos por la falta de actividad física. Hay que aterrizar acciones concretas tanto a nivel municipal y estatal, tomándose la iniciativa desde el hogar seguido de las escuelas. Debemos ser conscientes de los argumentos y cifras que nos da la OMS, y lo importante es actuar lo más pronto posible. almamaraton@hotmail.com